Griselda Sánchez, secretaria de contratación colectiva y reclamos del Sindicato Venezolano de Maestros del Distrito Capital, calificó como un “genocidio” lo que ocurre hoy en Venezuela con la clase obrera del país y en especial con los docentes.
Manifestó que actualmente el sector educación está “desasistido”, debido a que los docentes están recibiendo un salario de $3 a $4 por parte del Ministerio de Educación.
“El problema que realmente tenemos es el salario, porque con lo que pagan no se vive y a los que se les hace difícil llegar a las escuelas, por el costo del pasaje les están suspendiendo el sueldo”.
Asimismo, comentó que en las últimas protestas han exigido una bonificación de $100 que si bien es cierto no es la solución, los ayudaría a paliar la situación ante la crisis.
Sánchez, indicó que los maestros han tenido que reinventarse para no morir de hambre. “El país que no invierte en educación no tiene las posibilidades de salir adelante y a eso nos hemos enfrentado”.
“El 80% de las escuelas están sufriendo de un alto deterioro físico y no cuentan con los principales servicios públicos. Muchos de los directores a cargos no están preparados y muchos de los que están dando clases son obreros”, afirmó en el programa Giro Informativo con Williams Pérez.
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Por otro lado, la especialista en Políticas Públicas para la Educación e investigadora del Cendes, Mabel Mundó, recalcó que lo más importante para que la educación genere una sociedad sostenible es un hogar bien constituido, una estructura socioeconómica sólida y docentes preparados.
«Lo que se está viviendo es un problema bien lamentable, por la fuga de docentes y el poco interés que tiene la gente joven por estudiar educación». enfatizó.
Mundó sostuvo que el sector educativo no está totalmente preparado para mantener las clases vía online, ya que no hay una preparación tecnológica por parte de los estudiantes ni de los docentes por la crisis económica y a las fallas de los servicios públicos.
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